[2] Maudsley es el preso británico que más tiempo lleva en confinamiento solitario.
Pasó sus primeros años en Natzaret House (un orfanato religioso) en Crosby, Liverpool junto a sus tres hermanos mayores.
A la edad de ocho años, los niños volvieron con sus padres y sufrió regularmente abusos físicos hasta que finalmente se les retiró la custodia.
[5] Maudsley se entregó a la policía, diciendo que necesitaba atención psiquiátrica.
Intentó atraer a más prisioneros hacia su celda, pero todos rehusaron.
Maudsley luego tranquilamente entró en la oficina del ala y colocó el arma homicida sobre la mesa del jefe de la sección, avisando que en la próxima llamada a lista faltarían dos.
Los únicos utensilios que tiene son una mesa y una silla, ambos hechos de cartulina comprimida.
[5] En 2010, Maudsley hizo una petición para serle permitido jugar a juegos de mesa con el personal de la prisión para aliviar su aburrimiento en el confinamiento solitario.