Para fijar las dos piezas planas se debe efectuar un orificio en ambas caras.
Para cada aplicación será mejor elegir una tipología de roblón u otra.
Otro factor a tener en cuenta en uniones heterogéneas metálicas (diferente material) es la posibilidad de corrosión por par galvánico.
A continuación se exponen los ámbitos de aplicación más representativos.
Sobre la base de todo lo expuesto anteriormente, se puede ver que no es un proceso sencillo.
Las piezas a unir y el roblón quedan con interferencia dimensional, sin deformaciones curvas.
El roblón rellena completamente el agujero, debido a su expansión por deformación plástica.
En caso contrario, se puede practicar un taladro longitudinal que atraviese el roblón.
Consiste en el aplastamiento de las caras laterales del remache debido a la compresión realizada por las chapas.
La distribución de tensiones es compleja, por lo que se considera un modelo simplificado, según el cual, la tensión se obtiene considerando, como área resistente a compresión, la proyección diametral del área de contacto.
El criterio de diseño para evitar este fallo se calcula como: siendo
el espesor de la chapa más delgada, d el diámetro del remache.
El montaje manual resulta muy caro y solo es rentable en reparaciones o series muy cortas.
Para más información se pueden consultar guías de precios en la bibliografía.