Las Murgas son conjuntos músico-vocales formados por aficionados y vinculados esencialmente, aunque su actividad no se limita a esos días, al Carnaval del Toro que se celebra en dicha población en torno al mes de febrero.
Efectivamente, la principal actividad de las murgas se centra en las dos semanas anteriores al Carnaval del Toro, cuando los murguistas salen diariamente a rondar a la población de Ciudad Rodrigo, interpretando los temas que le son propios y que han llegado a ser conocidos por todos los mirobrigenses.
La música de la murga se basa o bien en composiciones propias o en canciones populares (cuplés, pasodobles…) a los que se modifica la letra para hacerla alusiva a Ciudad Rodrigo.
[2] Las letras, como ya hemos dicho, reflejan la actualidad de la ciudad, destacando especialmente las conocidas como “Cadenas”, composiciones en las que, mediante estrofas de ocho versos, se van narrando los acontecimientos más relevantes del último año y que unen el buen humor y la crítica a las autoridades competentes, si bien esta crítica debió ser silenciada en los primeros años de la Rondalla Tres Columnas, cuando los correspondientes Libros de Coplas debían ser visados por la autoridad gubernativa.
Como figuras destacadas dentro de la historia de las murgas se pueden citar a murguistas como Eustaquio Jiménez Trejo, Pedro Herrero Trucho, Agustín San Ezequiel Triguito, Ángel Cardoso, Tomás Sangalo, Ramón Turiel o el inolvidable Joaquín Fiz Plaza "Tato", fallecido en 2013 y que fuera el alma de la murga en estos últimos años; compositores como Modesto Rebollo, Camilo Rey, Agustín González Chico (curiosamente, los tres músicos militares), los Bilbaínos, Cándido Ledesma, Lucía Ortega o el propio Tomás Sangalo y letristas inolvidables como Jacinto Sánchez Vasconcellos Chanito, José Casillas o Alfonso Ortiz Tovar.