Royal Aircraft Factory S.E.4a

Aunque tenía una designación similar al anterior Royal Aircraft Factory S.E.4 de Folland de 1914, que había sido diseñado para ser el avión más rápido del mundo, el S.E.4a era fundamentalmente un avión nuevo, pensado para investigar las relaciones entre la estabilidad y la maniobrabilidad, y para su posible uso operacional.

[2]​ El fuselaje del primer prototipo pasaba suavemente a una sección circular usando cuadernas y larguerillos, estando la parte delantera, hasta la cabina, recubierta con metal, y la trasera, con tela.

[3]​[4]​ El motor del primer prototipo, un motor rotativo Gnome de 60 kW (80 hp), fue montado dentro de una alisada capota, moviendo una hélice bipala equipada con un gran tapabuje romo.

Se descubrió que provocaba el sobrecalientamiento del motor y fue reemplazado por una disposición más convencional.

[6]​ Los S.E.4a probaron ser fáciles de volar, mostrando excelentes capacidades acrobáticas,[7]​ pero estaban sobrecargados y faltos de potencia, y no se desarrollaron.