Rubí es una bella joven universitaria que vive junto con su madre Doña Refugio y su hermana Cristina en una pobre vecindad.
Rubí siente curiosidad por Héctor y coquetamente lo recibe sin saber que este trae a su mejor amigo de toda la vida el recién titulado en Ortopedia, Alejandro Cárdenas.
Al parecer a Rubí la vida le sonríe, tiene un novio guapo, joven y rico, pero realmente es una falsa idea que se ha hecho, ya que este es ayudado económicamente por su mejor amigo, además de pertenecer a una familia de clase media y terminó sus estudios por medio de becas.
No obstante Rubí en medio de su confusión y su rechazo al joven médico por ser pobre, rompe la relación con él.
Mientras todos se ocupaban de la maravillosa boda de Maribel y Héctor, Rubí logra que esta le consiga trabajo en la oficina de su novio, y es entonces que comienza discretamente a enamorar al joven arquitecto, haciéndole creer que lo ama con locura, enloqueciéndolo con su sensualidad y finalmente logrando su propósito.
Cristina, que está embarazada, le da la noticia a Doña Refugio.
Héctor comienza a tener unos terribles celos, problemas económicos y una extraña enfermedad.
Alejandro, quien descubre la verdadera personalidad de Rubí y sus mentiras, ya no tiene el sentimiento de amor por esta y solo por el hijo que espera siente compromiso.
Debido a ello, queda con varias cicatrices profundas en el rostro y pierde su pierna derecha.
[5] Fernanda,[6] quien decide cumplir con la venganza de su tía, se dirige a la oficina de Alejandro, y cuando él ingresa queda totalmente sorprendido y confundido le dice «Rubí».