En un principio el topónimio fue Salillas, hasta que adoptó el nombre de Salinas en 1717.
Al fondo del núcleo se halla una profunda barrancada con manantiales salinos, los cuales permitieron la explotación de sal en el pasado.
Tuvo ayuntamiento propio desde 1834 hasta 1845, año en que se unió a Clamosa.
Posee además una casa fortificada denominada Casa Palacio que es un buen ejemplo de Las Casas Torreadas del Alto Aragón La iglesia parroquial está dedicada a la Asunción, de estilo románico del siglo XII.
Entre la arquitectura civil destaca casa Palacio, una mansión fortificada construida sobre pedestral calizo en el siglo XVI.