El espacio alberga un sitio donde se celebran misas,[3] un museo que expone la vida y obra de la beata María de San José (Laura Evangelista Alvarado Cardozo) y un lugar donde se colocan placas de agradecimiento por parte de fieles católicos.
El santuario fue construido en reconocimiento a Laura Evangelista Alvarado Cardozo, una monja católica nacida en Aragua en 1875, que fue declarada venerable en marzo de 1992 y beata en marzo de 1994.
En ambos casos durante el pontificado del papa Juan Pablo II.
Durante su vida recorrió diversos lugares de Venezuela creando hospitales, asilos, orfanatos y colegios.
Cuando fue exhumada en 1994 su cuerpo se mantenía intacto y hoy es exhibido en el santuario.