Hijo de Manuela Díaz Tresgallo y Sebastián García Bravo-Ferrer, nació en el barrio de San Julián de la capital hispalense, donde transcurre sus primeros años al igual que las temporadas que pasaba en la sierra onubense del Andévalo y en la Sierra de Estepa, lugares que marcaron claramente sus experiencias infantiles y adolescentes.
En 1959 regresa a Sevilla como catedrático de Patología y Clínica Quirúrgica.
Igualmente, cumplimentó su formación académica en Madrid, Estrasburgo, Marsella, Düsseldorf, Londres y Paris.
Digno de mencionarse es, asimismo, su labor en el Hospital Universitario donde organizó los servicios de Cirugía Torácica, Cardiovascular, Digestiva, Urológica, Plástica, Infantil, Traumatología y Ortopedia.
Ingresó, en 1966, en la Real Academia de Buenas Letras de Sevilla cuyo discurso de ingreso se tituló Ciencia, verdad y espíritu en Alexis Carrel.