[1] El acceso a energía barata se ha vuelto esencial para el funcionamiento de las economías modernas.
[3] Los accidentes nucleares de Fukushima I en Japón han llamado la atención sobre cómo los sistemas nacionales de energía son vulnerables a los desastres naturales, y el cambio climático ya trae más clima y extremos climáticos.
La AIE sugiere que la contribución directa que la energía renovable puede hacer a la calefacción de espacios domésticos o comerciales y al calor de procesos industriales debe examinarse más detenidamente.
Los sistemas pueden usarse para calentar agua caliente doméstica, piscinas o casas y negocios.
La variabilidad rara vez será una barrera para un mayor despliegue de energía renovable.
Pero a altos niveles de penetración en el mercado, requiere un análisis y administración cuidadosos, y pueden requerirse costos adicionales para la copia de seguridad o la modificación del sistema.
Dinamarca no se queda atrás, ya que suministra el 22% de su energía del viento en 2010 (26% en un año eólico promedio).
Solo durante 2005-2010, Portugal saltó del 17% al 45% de electricidad renovable.
[13] Sin embargo, el impacto de la solución de controversias a través del arbitraje o la negociación internacional también se considera una herramienta útil para fomentar la inversión en energía sostenible y abordar los problemas relacionados con la seguridad, las amenazas ambientales y el desarrollo sostenible.