Shiba Gorō

El castillo de Aizuwakamatsu caería más tarde ante las fuerzas del nuevo gobierno Meiji y la región se rindió.

Shiba trabajó inicialmente en el nuevo dominio para ayudar a establecer una escuela han y un nuevo edificio gubernamental, pero con la abolición del sistema han, se mudó a Toquio y se alistó en el incipiente Ejército Imperial Japonés en 1873.

Shiba sirvió en la primera guerra sino-japonesa desde abril de 1895, pero regresó al Reino Unido en septiembre del mismo año.

Shiba fue enviado como observador militar a los Estados Unidos y fue presentado al secretario de Guerra de los Estados Unidos, Russell A. Alger, quien aceptó que Shiba se integrara al quinto cuerpo del Ejército estadounidense, comandado por el mayor general William Rufus Shafter durante la guerra hispano-estadounidense.

George Ernest Morrison escribió para The Times: «Entre los extranjeros sitiados, nadie luchó tan valientemente y cumplió su misión como los japoneses.

Más tarde fue nombrado miembro de la embajada británica y asumió su cargo en julio.

Fue elegido para acompañar al príncipe Yorihito Higashifushimi a Inglaterra en junio de 1918.

Junto con los informes del reportero de The Times George Ernest Morrison, Gorō Shiba se convirtió en el primer ciudadano japonés en ser ampliamente conocido en Occidente.

[4]​[5]​ También era conocido como el principal experto en China del ejército y era enviado ahí siempre que era necesario.

Por esta razón, se considera a Shiba como la persona detrás de escena que creó la oportunidad para la alianza anglo-japonesa.

Gorō Shiba.