Siervas del Santuario

A las religiosas de este instituto se les conoce como siervas del Santuario.

En 1911, el instituto levantó en esa misma ciudad la primera curia general.

Mientras que la tercera superiora general, Vicenta Altamura, trasladó la casa general a Roma y abrió el instituto a los cambios del Concilio Vaticano II.

[2]​ La Congregación de las Hermanas Siervas del Santuario es un instituto religioso centralizado, cuyo gobierno es ejercido por una superiora general a la que sus miembros llaman Madre.

En el gobierno, la Madre general es coadyuvada por su consejo, elegido para un periodo de seis años.