[1] Los sijs en Argentina se establecieron en gran medida a principios del siglo XX para trabajar en las líneas ferroviarias que conectaban con Bolivia o en molinos azucareros británicos.
[2] En consecuencia, muchos sijs viajaron a Argentina en busca de oportunidades económicas.
Estas reacciones resultaron en restricciones de entrada, esfuerzos para excluirlos del mercado laboral e intercambios diplomáticos con autoridades imperiales británicas.
[6] Los sijs en América Latina, incluyendo aquellos en Argentina, han sido objeto de investigación académica.
[9] Muchos sijs poseen actualmente ranchos, empresas de transporte, supermercados y tiendas en Argentina.