Allí fue camarero secreto del papa Pío XI antes de regresar a San Juan.
Fue consagrado en diciembre de ese año por el cardenal Antonio Caggiano.
Finalmente, el cargo fue cubierto en octubre de 1954, cuando el mismo sumo pontífice nombró obispo a S.E.R.
No obstante, inmediatamente después se inició la crisis entre el estado nacional y la Iglesia católica, por lo que la bula con el nombramiento fue retenida por el gobierno.
[1] Sus restos descansan en la Iglesia Catedral Basílica "Nuestra Señora de Rosario".