Sinagoga de Cuneo

El lugar de culto permaneció ininterrumpido en la misma zona, pero en 1884, tras la emancipación, el templo fue completamente renovado tanto por fuera como por dentro.

Con la reestructuración del siglo XIX, la sinagoga adquirió en primer lugar una gran fachada, ya que estaba excluida de las antiguas sinagogas del gueto, que debían permanecer ocultas dentro de edificios anónimos.

Destaca una inscripción en hebreo para decorar el arquitrabe: "Me harán un santuario y yo viviré entre ellos" (Ex 25,8).

Sobre la cornisa se repite el motivo de las dos columnas que enmarcan tres pequeñas ventanas.

Los bancos están todos colocados en la dirección del Aron y el Bimah, ambos ubicados en el lado este, de acuerdo con la tendencia del siglo XIX que era proclive a que la estructura de la sinagoga fuera más similar a una iglesia.