Sinfonía n.º 7 (Bruckner)

Fue sometida a una revisión que terminó en 1885, lo cual fue una práctica común en la producción sinfónica del maestro austríaco.

[5]​[6]​ Ediciones: Poco después del estreno en 1884 Bruckner introdujo algunos cambios bajo la influencia de Franz Schalk, Ferdinand Löwe y Arthur Nikisch.

Los fondos recaudados se destinaron a sufragar un monumento en memoria de Richard Wagner, fallecido el año anterior mientras Bruckner componía esta sinfonía.

La primera edición de la pieza fue llevada a cabo en 1885 por el editor Albert J. Gutmann en Viena.

[10]​ El primer movimiento, Allegro moderato, está escrito en la tonalidad de mi mayor, en compás alla breve y responde a la forma sonata.

La exposición consta de tres temas, lo cual es un recurso arquitectónico habitual en Bruckner desde la Sinfonía en fa menor.

La recapitulación es variada; un largo crescendo que utiliza fragmentos del tema inicial forma una coda brillante y dinámica.

Bruckner llega a la coda repitiendo el segundo tema en el sonido variante de la tonalidad inicial (es decir, mi menor) y el tercer grupo temático muy variado.

El punto culminante se produce con la tercera repetición del tema principal que, contra un acompañamiento de seisillos ascendentes en ostinato, es impulsado hacia un clímax fulgurante en do mayor.

Bruckner comenzó a escribir el Adagio unas semanas antes de la muerte del maestro alemán, la que probablemente anticipó.

Etwas langsamer (Ligeramente más lento), está en la menor que en el trío pasa a fa mayor y en compás de 3/4.

Este movimiento supone un contraste tan asombroso como el momento correspondiente en la Eroica de Beethoven.

El ritmo de la sección da capo scherzo, que vuelve a emerger como una tormenta, es anunciado en pianissimo por los timbales en los últimos cuatro compases del trío.

Bewegt, doch nicht zu schnell (En movimiento, pero no demasiado rápido), retoma la tonalidad inicial, el compás alla breve y la forma sonata.

La coda, de carácter extrovertido, comienza tranquilamente como un clímax con el tema principal final algo ampliado, que hacia el final nos devuelve el poderoso tema principal del primer movimiento, ahora en un fortissimo de toda la orquesta.

Bruckner en 1886.
Arthur Nikisch , director del estreno.
Luis II , dedicatario de la pieza, con Josef Kainz en 1881.
Inauguración del Monumento a Wagner en el Tiergarten de Anton Werner (1908).