En 1906, Carmèlo Ciaccio observó que unas "células claras" que presentaban una gran afinidad por las tinciones con sales de plata, y las nombró de acuerdo a esa característica histológica como argentafines y células enterocromafines.
En 1914 Claude Pierre Masson postuló que esas “células claras” dispersas, descritas en el tracto gastrointestinal, formaban parte de una sola "unidad funcional".
[3] El concepto de un sistema "Neuroendocrino difuso" (DNES en inglés) evolucionó a medida que las técnicas de inmunohistoquímica, reemplazaron a las tinciones convencionales, demostrando ser superiores para visualizar y caracterizar estas células.
[4] El sistema Neuroendocrino Difuso, incluye células especializadas de distinto origen embriológico, que forman parte de estructuras funcionales tan diferentes como el tracto digestivo, el páncreas, el aparato respiratorio, la hipófisis y la médula adrenal.
[6] Las células APUD en ocasiones degeneran en tumores llamados neuroendócrinos o "APUDomas" que se caracterizan por sintetizar polipéptidos con actividad hormonal.