José Remigio Sarabia Rojas, un indio del pueblo de Santiago Nuyoo, con su astucia logró evadir el cerco de la ciudad para dar aviso al general José María Morelos, que se encontraba en Chilapa, Guerrero, que Huajuapan estaba sitiado.
Después de este hecho, Miguel Bravo marchó con dirección a Cuautla en apoyo del Generalísimo José María Morelos y Pavón que se encontraba asediado por las tropas novohispanas, mientras que Trujano fortificó Huajuapan, ante lo cual el comandante realista Bonavia formó una división para desalojar la plaza tomada por los insurgentes.
Desde entonces las fiestas de Huajuapan se conmemoran en esa fecha, conservando su contenido histórico y religioso.
Al final de cada evento religioso se presentan actos culturales, artísticos y recreativos, sin faltar los juegos pirotécnicos.
Empresas cerveceras colocan carpas y presentan todas las noches diversos espectáculos artísticos, llevando artistas, cómicos, modelos y dobles de cantantes; los cuales hacen que la gente que acude a estos eventos pase un rato agradable.