El disco incorporó además dos nuevos temas, grabados con la ausencia del bajista Gene Simmons, así como una nueva versión de la balada «Beth» cantada por el batería Eric Carr, que supuso su debut como cantante.
[2] «Let's Put the X in Sex» guarda similitudes con «Addicted to Love» de Robert Palmer y es un tema festivo con letras insinuantes.
[23] Respecto a sus dos sencillos, «Let's Put the X in Sex» y «(You Make Me) Rock Hard», solo el primero entró en las listas, aunque en posiciones discretas.
Ambas seguramente cuenten como algunas de las mejores piezas que el grupo ha realizado en mucho tiempo».
[30] Con el paso del tiempo recibió buenas reseñas por su condición de antología, pero las nuevas canciones, por lo general, fueron una excepción.
Chuck Klosterman de Grantland comentó que la nueva versión de «Beth» parece realizada con «el único propósito de hacer que Peter Criss se sienta mal» y describió a las dos pistas inéditas como «humillantes para todos los involucrados, aunque ha pasado suficiente tiempo para hacer que “Let's Put the X in Sex” sea tontamente encantadora».
[31] Barry Weber de Allmusic escribió que «la combinación de power rock clásico y pop metal es lo que hace que el disco sea entretenido y las dos nuevas pistas del álbum “Let's Put the X in Sex” y “(You Make Me) Rock Hard”, continúan mostrando las interesantes melodías de Kiss [...] Aunque solo es necesario para el ávido fanático de la banda, Smashes, Thrashes & Hits es una compilación aceptable y otra buena introducción al grupo».
[24] Matthew Wilkening de Ultimate Classic Rock seleccionó a «(You Make Me) Rock Hard» como la octava peor canción en la carrera del cuarteto y opinó que «los dos nuevos temas ilustran perfectamente la teoría de Spinal Tap sobre la delgada línea entre lo inteligente y lo estúpido».