Société Générale de Belgique

Fue fundada en 1822 por Guillermo I, y existió hasta 2003, cuando su entonces único accionista, Suez Lyonnaise des Eaux, la fusionó con Tractebel para formar Suez-Tractebel.

Aunque a Bélgica se le ofreció la independencia por los prusianos, el vizconde Castlereagh la vetó con el argumento que el país era demasiado pequeño para ser económicamente viable, y la cuestión fue entonces quién la gobernaría, dado que los austríacos se habían lavado las manos como consecuencia de la rotura del imperio de los Habsburgo.

Aunque Guillermo I de los Países Bajos, rehusó el gobierno inicialmente argumentando el coste añadido para el mantenimiento del nuevo ejército, Castlereigh los convenció preguntándoles se prefería ser Príncipe de Orange o Rey de los Países Bajos, añadiendo que desde un punto de vista práctico los Estados Ducales belgas suponían un tercio del país.

En los años anteriores a la Segunda Guerra Mundial, la compañía invirtió en carreteras, ferrocarriles y canales.

Después del Crash de 1929, la compañía dividió su segmento bancario (1934), convirtiéndose en el Generale Bank (ahora Fortis, que más tarde sería vendida a BNP Paribas, resultando en BNP Paribas Fortis), pero permaneció como su mayor accionista.

Antigua sede de la Société Générale de Belgique / Generale Bank en Bruselas, rue Royale