Sofía de Sajonia-Weimar-Eisenach (1888-1913)

Su padre era sobrino segundo del gran duque entonces reinante, Carlos Alejandro.

En esta ciudad conoció a un joven estudiante, el barón Hans von Bleichroederer, hijo de un acaudalado banquero de origen judío, Gerson von Bleichröder.

La joven Sofía llegó a pedir en junio de 1913 a Guillermo II de Alemania, su consentimiento para contraer matrimonio morganático con Hans, pero el emperador lo rechazó.

Aunque a Sofía le hubiera gustado casarse con el consentimiento del emperador, afirmó que, si al final no era posible, se casaría de todos modos.

Un sirviente descubrió poco después el cadáver de la princesa.