El spolvero (derivado del italiano polvere, 'polvo') es una técnica artística utilizada para transferir una imagen de una superficie a otra.
Ha sido una técnica común durante siglos, utilizada para crear copias de retratos y otras obras que se terminarían como pinturas al óleo, grabados, frescos, cerámica, etcétera.
El método más común consiste en colocar papel semitransparente sobre la imagen original y luego repasar a lo largo de las líneas de la imagen creando marcas perforadas en la hoja de papel superior.
Este dibujo punzado se coloca sobre una nueva superficie de trabajo.
El polvo se aplica colocándolo en una pequeña bolsa de tela delgada, como una gasa, y luego se frota suavemente sobre los agujeros punzados del dibujo.