Comúnmente se usa para obtener permisos de root para operaciones administrativas, sin tener que salir y reentrar al sistema.
Algunos entornos de escritorio, entre ellos GNOME y KDE, tienen programas que piden gráficamente una contraseña antes de permitir al usuario ejecutar un comando que usualmente requeriría tal acceso.
El nombre su proviene del inglés substitute user[1],[2] (cambiar usuario).
También hay quien lo hace derivar de superuser (super-usuario, es decir, el usuario root) ya que habitualmente se utiliza para adoptar el rol de administrador del sistema.
Cuando se ejecuta, su pide la contraseña de la cuenta a la se quiere acceder, y si es aceptada, da acceso a dicha cuenta.