Suelo franco

Se suele denominar suelo franco a las partes superficiales del terreno cuya composición cuantitativa está en proporciones óptimas o muy próximas a ellas.

Es suelo de elevada productividad agrícola, en virtud de su: Aunque la composición del suelo franco puede variar ligeramente, se pueden considerar uniformes las proporciones porcentuales siguientes:[2]​ La cualidad principal de este tipo de suelo es que no es demasiado arcilloso, ni muy arenoso.

En el suelo franco propiamente dicho pueden existir variaciones, según el componente de mayores proporciones.

Si ocurre lo siguiente: Al suelo franco algunos autores le asignan la calificación de marga, de modo que los nombres equivalentes serían, para el «1», marga arenosa; para el «2», marga arcillosa... Es suelo de realzada la creación agrícola, en virtud de su: Textura relativamente suelta -propiciada por la arena- Fertilidad -aportada por los limos Por su textura equilibrada así como por mejores características físicas y químicas, este tipo de suelo es el más apto para el cultivo.

Por ello un mantenimiento óptimo reduce al mínimo los inconvenientes que puedan surgir durante el crecimiento de los vegetales.

Esto es un suelo franco