Túnel de Sarajevo

Fue construido a mano durante cuatro meses y cuatro días por el Ejército de Bosnia y voluntarios civiles.

[3]​ Su objetivo era unir la ciudad de Sarajevo, que fue cortada en su totalidad por las fuerzas serbias, con el territorio bosnio en el otro lado del aeropuerto de Sarajevo, una zona controlada por las Naciones Unidas.

Aunque su función inicial era introducir los suministros de guerra, también se aprovechó el túnel para enviar soldados a otros frentes, permitir la salida de civiles del asedio e introducir en la ciudad de Sarajevo la ayuda humanitaria, alimentos, combustible y electricidad.

Sin embargo, Ratko Mladic, el jefe militar serbobosnio durante la guerra tomó la decisión de no bombardearlo porque pensó que podría ser una vía de evacuación de la ciudad para que finalmente pasara al poder serbio.

[6]​ En 2012 se fundó el Museo del Túnel de la Esperanza que permite visitar los últimos metros del Túnel de Sarajevo.