La palabra Tania («segundo») proviene del árabe y hace referencia al «segundo salto», ya que para los antiguos árabes, las estrellas que nosotros asociamos con las patas de la osa eran las huellas de gacelas saltando.
La palabra Borealis, proveniente del latín, alude a su condición de estrella del norte, para diferenciarla de Tania Australis (μ Ursae Majoris), situada al sur.
Al igual que otras estrellas similares —véase Vega (α Lyrae) o Fomalhaut (α Piscis Austrini)—, presenta un exceso de radiación en el infrarrojo, debido a la existencia de un disco circunestelar.
Asimismo, es una estrella con líneas metálicas «leve», enriquecida en zinc y europio pero deficiente en calcio.
[2] Sin embargo, estas características no son tan acusadas como para que se la catalogue como estrella Am.