Fue descubierta en abril de 1994 por Pierre Woodman, que trabajaba como director para la revista Private Media Group y se encontraba buscando bellezas eslavas.
Tres meses después, al cumplir los 20 años, ella decide pasar el casting para hacer porno.
Al mes siguiente viajan a Moscú donde Tania realiza su primera sesión de fotos.
Ese mismo año, luego de haber sido una Penthouse Pet, puso fin a su carrera pornográfica.
Fue asistente de su marido, que hizo un documental sobre su carrera, "Tania Russof Story".