En el sistema de castas americanas durante la colonia, tercerón o morisco era el hijo de un padre mulato y otro blanco, es decir, de tres cuartos blanco y un cuarto negro.
[1] Por ampliación, tercerón es aquella persona fenotípicamente blanca, pero genotípicamente de generaciones recientes mulatas.
[2] Podemos hoy encontrar grandes poblaciones terceronas en las Islas Canarias[3] y todo el norte de África.
Las poblaciones nativas de Arabia Saudita[4] son de una conformación morisca desde miles de años.
También representan poblaciones notables en América Latina, tales como la mayoría de los portorriqueños y una gran parte de los dominicanos, brasileños y cubanos.