Charles Spotswoode se alegra cuando su hijo Jimmy abandona su romance con la intrigante corista Margaret O'Dell – conocida como "The Canary" – y reanuda su compromiso con su vecina Alice La Fosse.
Le amenaza con revelar el desfalco perpetrado por Jimmy del banco más grande de Spotswoode si Jimmy se casa con Alice, y a pesar de sus súplicas, se niega a negociar.
Ella se niega a darle nada, incluso después de que le pegue.
Cleaver, Mannix y Lindquist son mostrados acechando el edificio esa noche.
Sheel, que presenció el asesinato escondido en un armario, envía al asesino varias cartas de chantaje.
Telefonea a Charles Spotswoode con la noticia y sugiere que se reúnan en una hora.
Spotswoode había hecho una grabación (Vance especula que el propio Spotswoode pudo imitar la voz de la mujer) para engañar a un testigo tartamudo haciéndole creer que The Canary estaba viva después de su asesinato.
[3][4] Sin embargo, una vez terminada, Paramount decidió convertir todas sus películas pendientes de estreno en sonoras.
Paramount le envió un telegrama a Berlín, reclamando que regresara para grabar sus diálogos.
Brooks dijo que ya no tenía ninguna obligación con Paramount, y se negó.
[4] The New York World declaró que la película era un ejemplo "de una película con una buena trama y un mal diálogo hablado", mientras The Cincinnati Enquirer calificó a Brooks como "mucho más satisfactoria ópticamente que auditivamente".