Allí conoce a Nicholas Muss, un hugonote que le invita cuando no puede pagar.
Al día siguiente, el Abad de Amboise llega a su residencia en París.
Cuando el Consejo se reanuda a la mañana siguiente, Tavannes y De Coligny siguen en conflicto, y el Rey está menos inclinado a los argumentos de Coligny para entrar en guerra.
También discuten sobre los asuntos locales, exigiendo De Coligny más acción para proteger a los hugonotes.
Este sale corriendo y es testigo del intento de asesinato, pero por suerte solo logran herirle.
En la corte, el Rey, se enfurece al saber del intento de asesinato y jura que atrapará a los conspiradores.
También se vuelve contra la Reina Madre, pensando que sus manos están manchadas de la sangre del asesinato frustrado, y le amenaza con llevarla a un convento si no se olvida de sus maquinaciones políticas.
Steven se dirige a los aposentos del Abad y ve el cuerpo allí.
Al día siguiente, Steven vuelve triste a la tienda de Preslin y se reúne con Anne.
Poco después le sorprende ver al Doctor en persona, quien no admite críticas por su ausencia, e insiste que Steven y él deben abandonar la ciudad tan pronto como sea posible.
Cuando la TARDIS aterriza, Steven le da un tenso adiós y sale a una zona de bosques.
La TARDIS ha aterrizado en 1966, y una joven entra en la nave creyendo que es una cabina de policía en Wimbledon Common.
Al oír la advertencia de Steven, el Doctor desmaterializa a toda prisa la TARDIS, sin darse cuenta hasta que ya han abandonado 1966 de que Dodo aún está a bordo.