A primera vista, The Duke ("duque" en español) fue más "normal" que las anteriores encarnaciones de Bowie, utilizando un estilo cabaret, aunque debido a la adicción a la cocaína del cantante, cambió su personalidad, o al menos en algunas de sus entrevistas mostró una personalidad "difícil".
Más adelante recuerda que en aquella época vivía a base de "pimientos rojos, cocaína y leche".
[1] Vestido con camisa blanca, pantalones negros y chaleco, The Duke era un personaje vacío que cantaba canciones románticas con una angustiante intensidad mientras no sentía nada.
[2] Se ha descrito al personaje como "un aristócrata loco",[2] "un zombie amoral",[3] y "un superman ario sin sentimientos".
[4] Para el mismo Bowie, The Duke era un "personaje sin duda desagradable",[5] y dijo después, "un ogro para mí".