Tibrón

Si, en cambio, permanecía activa en la Magna Grecia, organizada con las colonias dorias (Heraclea Minoa y otras) y lacedemonias (Tarento): desde el año 346 a. C., con la ayuda de dichas Polis (ciudades), mantenía su poder naval en el Mar Mediterráneo.

La ocasión se presentó cuando Hárpalo, antiguo tesorero de Alejandro Magno que había huido con una parte del tesoro (5000 talentos), buscaba tropas para reclutar para partir con él fuera de Asia Menor.

Según Arriano ya había muerto cuando llegó Tibrón a Cidonia,[8]​ ciudad de Creta.

A estos y a los exiliados de Barca que había en Creta, Esparta no los podía apoyar oficialmente con una expedición, por ello intentaba conseguir un grupo de dirigentes cireneos que la reconociera como una aliada hegemónica.

Se apoderó del puerto, que fue saqueado, puso asedio a Cirene, batió a los cireneos y les hizo concluir un pacto, cuyos términos eran que debían pagarle 500 talentos de plata y participar con la mitad de sus carros en sus campañas.

Envió embajadores a otras ciudades para firmar un tratado bilateral para conquistar la vecina Libia.