Los dos países afirmaron derechos históricos sobre la zona, mientras que Naciones Unidas reclamó que se permitiera a la población indígena (saharauis) con derecho de autodeterminación decidir en referéndum si el territorio debía unirse a cualquiera de los estados vecinos, o establecerse como país independiente.
En éste, el Frente Polisario retiraba cualquier pretensión de soberanía sobre Mauritania tras los ataques a Nuakchot y Zouerate.
[3] En 1984 el presidente mauritano Mohamed Khouna Uld Haidalla reconoció el apoyo al Polisario y la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) como legítima soberana de la zona.
Tenía unos pocos asentamientos menores salpicados por la costa, y el mayor de ellos, Dajla (antigua Villa Cisneros), se convirtió en la capital provincial.
Algunos informes indican que el territorio puede alojar cantidades importantes de recursos minerales como hierro (se especula, pero no hay ninguna prueba) o petróleo en la costa, pero la guerra impidió cualquier esfuerzo de exploración significativo.
El nombre de "Zemmour" se refiere a una cadena montañosa en el centro del Sáhara Occidental.
El tribunal reconoció la importancia de estos vínculos culturales, pero anunció que no habían constituido la soberanía sobre el territorio o sus habitantes antes del colonialismo, y no podían justificar por sí mismos la soberanía en la actualidad.