Fue enviado a la frontera con Guatemala, por la inminencia de guerra con este país, a causa del asesinato en México del expresidente Manuel Lisandro Barillas Bercián, dirigida por el presidente Manuel Estrada Cabrera.
Actuó como miembro de la comisión geográfica exploradora en Sonora, y más tarde ejerció la docencia en el Colegio Militar.
En 1913, durante la Decena Trágica dirigió una de las columnas que escoltaron al presidente Francisco I. Madero.
Se mantuvo fiel al villismo: fue jefe del Estado Mayor en la Brigada "Bracamontes".
En 1915 participó en la batalla de Celaya, donde fue herido; posteriormente se expatrió.