Los terrenos sobre los que se ubica son aluviales.
Generalmente son suelos profundos, que se han desarrollado a partir de roca caliza.
Tienen una fertilidad baja y están sometidos a fuertes procesos de erosión.
Las aguas de riego utilizadas son clorudadas sódicas, siendo los iones predominantes el sodio, sulfatos, calcio y cloruros.
Esta concentración de iones en el agua da origen a una gran concentración de azúcares y ácidos orgánicos en el fruto.