Toribio Maya

[1]​[2]​ La fama de su piedad llegó a ser tan conocida que el pueblo lo proclamó como un santo popular, aunque formalmente su proceso de canonización inició a mediados del siglo XX, estando aún en trámites.

Sus posteriores labores de caridad se dedicaron a atender a los enfermos en el Antiguo Hospital del Humilladero, en sus propias casas, campos o la calle sin tomar en cuenta el lugar, hora o las circunstancias en las que se encontraba.

[7]​ Dicho establecimiento prestaba sus servicios altruistamente y sin esperar beneficio económico alguno, demostrando con esto su noble labor caritativa.

[9]​ Fue enterrado en el Cementerio Católico Central de Popayán, durante tal evento se narran sucesos extraordinarios que la tradición popular han trasmitido hasta la Actualidad.

Una de ellas cuenta que se vieron a tres garzas blanquísimas sobrevolando el ataúd y la comitiva en forma de triángulo que la piadosa población relacionó con las tres virtudes cardinales y un mensaje divino.

El arzobispo de Popayán, monseñor Iván Antonio Marín López redactó en septiembre del 2000 una oración para implorar o impetrar una pronta beatificación y posterior canonización, la cual dicta así: ¡Señor Jesús!

Antiguo Hospital del Humilladero, donde don Toribio hizo varias obras de piedad, después se convertiría en la cárcel municipal
Casa donde murió don Toribio Maya en 1930, Calle de La Ermita
Placa en la casa donde murió don Toribio Maya
Cuadro de La Apoteosis de Popayán donde fue pintado don Toribio por Efraím Martínez