Tratado de Barcelona (1274)

A mediados del siglo XIII el reino de Granada estaba en manos de la dinastía nazarí.

Enfrentados con las tropas castellanas de Alfonso X, buscaron la alianza con los Benimerines, que controlaban la mayor parte del actual Marruecos, entregando a éstos las plazas de Algeciras, Tarifa y Gibraltar en pago por su apoyo militar.

Poco después, las desavenencias entre Nazaríes y Benimerines les llevaron a enfrentarse entre ellos, y ambas partes buscaron entonces la ayuda de los mercenarios cristianos.

Según los términos del acuerdo, firmado en Barcelona el 16 de noviembre de 1274, ambas partes se comprometían a: Como resultado del acuerdo, la ciudad de Ceuta fue rendida, y la flota atracada en su puerto destruida.

La plaza pasó a estar bajo control de los benimerines.