Está pintada al óleo sobre lienzo y sus dimensiones son de 60,6 x 133 cm.
Existe otra versión muy posterior (óleo sobre lienzo, 38,4 x 76,9 cm), de 1909.
), quienes aparecen en varias composiciones del autor, especialmente entre 1887 y 1900.
Dominan las coloraciones verdosas y azuladas, con matices terrosos, que sitúan la escena en un contexto sereno e impasible, alejado del espectador.
En cuanto a la indumentaria, ambas aparecen vestidas con el tradicional quitón (χιτών) de las mujeres de la Antigua Grecia, tan sumamente vaporosos que dejan prácticamente todo el cuerpo a la vista.