Así, literalmente, la teoría trivialista es algo expresado de la manera más simple posible.
Paul Kabay compara del trivialismo con las escuelas del escepticismo filosófico (en «One the Plenitude of Truth») - el pirronismo por ejemplo - que buscan alcanzar una forma de ataraxia o estado de imperturbabilidad; y afirma que el trivialista figurativo alcanza inherentemente este estado.
Supuestamente esto está justificado por el trivialista figurativo que considera verdaderas todas las situaciones, incluso en un estado de ansiedad.
Sin embargo, en tanto que los trivialistas afirman que todos los estados y cosas son universalmente verdaderos, los pirronistas ni afirman ni niegan la verdad (o falsedad) de estas cosas.
El filósofo australiano Paul Kabay, sostiene en su libro «A Defense of Trivialism» que ha habido varios filósofos en la historia han defendido puntos de vista similares al trivialismo, aunque no llega a definirlos como trivialistas.
Kabay también habla de Spinoza como un filósofo cuyas ideas se parecen a las del trivialismo.
Kabay también se refiere a Hegel como un filósofo cuyas ideas se acercan al trivialismo, y cita la afirmación de Hegel en «The Science of Logic»: «todo es inherentemente contradictorio».
Jody Azzouni se postula como defensor del trivialismo en su artículo «The Strengthened Liar» al afirmar que el lenguaje natural es trivial e inconsciente gracias a la existencia de la paradoja del mentiroso («Esta oración es falsa»), y que el lenguaje natural se ha desarrollado sin rumbo fijo.
Graham Priest en su libro de 2005 «Doubt Truth to Be as Liar», da a entender que el filósofo griego Anaxágoras es un posible trivialista.
(AT1) Antitrivialismo realista absoluto: En el mundo real, todas las proposiciones no tienen valor de verdadero o falso.
(AT2) Antitrivalismo minimalista: En algunos mundos, algunas proposiciones no tienen valor de verdadero o falso.
(AT4) Antitrivialismo distribuido: En todos los mundos, algunas proposiciones no tienen valor de verdadero o falso.
(AT5) Antitrivialismo sólido: Algunas proposiciones no tienen valor de verdadero o falso en ningún mundo.
La ley de la no contradicción: Nuevos ensayos filosóficos Oxford University Press.