Combinado con su posición estratégica al final de las Batura Muztagh, y rodeado por el río Hunza, el Ultar es un pico visualmente impactante.
El Ultar Sar se ganó la fama en la década de 1990 como supuestamente el pico independiente más alto del mundo sin haber sido escalado.
Sin embargo, esa percepción añadió atractivo al pico, y varias expediciones intentaron escalarlo.
Finalmente, en 1996 dos expediciones japonesas hicieron cumbre por separado, la primera el 11 de julio, de la sección Tokai del Club Alpino Japonés liderados por Akito Yamazaki, y la segunda expedición liderada por Ken Takahashi.
Akbar escaló el pico en estilo alpino usando viejas cuerdas fijas dejadas por una expedición anterior.