Vals del Emperador

Originalmente fue titulado Mano a mano, y fue compuesto en agosto de dicho año con motivo de la visita del Káiser Guillermo II de Alemania a Francisco José I, en Austria.

No obstante, finalmente se le dejaría el nombre actual de Kaiser-Walzer por ser considerado por Fritz Simrock un nombre diplomáticamente más apropiado.

La majestuosidad de la pieza se aprecia en su composición.

Comienza con una suave marcha que avanza en crescendo, a medida que se introduce la melodía principal.

Ésta permanece de fondo a lo largo del vals.