Las pilas de combustible en los vehículos de hidrógeno crean electricidad para hacer funcionar un motor eléctrico usando hidrógeno o un combustible de hidrocarbono y oxígeno del aire.
La eficacia de la pilas de combustible es limitada, debido a que se requiere energía para separar al hidrógeno de compuestos naturales (como el agua, gas natural, biomasa, etc.), también para compactarlo ya sea por compresión o licuefacción, más la pérdida de energía al convertirlo en electricidad con las pilas de combustible, lo cual deja solamente un 25% de uso práctico.
Todas las pilas de combustible están compuestas de tres partes: un electrolito, un ánodo y un cátodo.
[3] Estas funcionan de manera similar a la de una batería convencional, pero en vez de recargarse, estas son "rellenadas" con hidrógeno.
[4] Un vehículo propulsado por hidrógeno puro cero pocos contaminantes, solo agua y calor.