Vergüenza (película de 1928)

Un minero de Antofagasta contrae sífilis en un burdel, y al enterarse, se vuelve loco.

Pasado un tiempo el marido se recupera y la felicidad vuelve a la pareja.

Juan Pérez Berrocal y su esposa, la actriz Clara del Castillo, también se trasladaron hacia esa ciudad para desarrollar esta película, escrita y dirigida por Pérez Berrocal.

[3]​ Jara indica que Vergüenza fue bien recibida por el público y ha documentado una crítica relativamente favorable de la época.

La película se consideró por muchos años desaparecida, hasta que el cineasta Edmundo Urrutia recupera un fragmento que incorpora a su película documental “Recordando”, de 1960.