Se lo usa como ingrediente en pinturas, barnices y también para acabados de maderas finas.
Sin embargo, algunas de sus partes se usaron en pequeñas dosis en el pasado con propósitos medicinales.
Intoxicaciones más leves pueden dar síntomas como vómito, diarrea y bradipnea, y el roce de las hojas sobre la piel puede producir una erupción similar a la de la hiedra venenosa.
Poco antes de la Primera Guerra Mundial, el embajador norteamericano en China envió semillas de tung, que se plantaron en California, pero no prosperaron por el clima árido.
[3] Vernicia fordii fue descrito por (William Botting Hemsley) Herbert Kenneth Airy Shaw y publicado en Kew Bulletin 20(3): 394.