Algunos vesre o vesreísmos,[2] que son irregulares, no aplican totalmente la regla de inversión para permitir una adaptación fonética.
Así, mientras que ocurre una inversión silábica en palabras como bacán (adinerado o bueno) que se convierte en camba, en otras la metátesis no es exactamente una inversión silábica; por ejemplo, trabajo da jotraba y gallego da yoyega (yoyega por su parte tiene un sentido traslativo, por metonimia, ya que si inicialmente era el gentilicio gallego en vesre, luego ha pasado a significar a todo español o a toda persona con muy evidentes linajes españoles).
Asimismo, en ciertas ocasiones una palabra se somete al vesreamiento según más de una fórmula: trabajo → jotraba, batrajo.
A veces algunas combinaciones afortunadas permiten un doble juego: colimba (soldado conscripto) sería el vesre irregular de milico pero también indica COrre, LIMpia y BArre.
En algunas ocasiones, el término en vesre cambia parcialmente su significado; por ejemplo hotel se transforma en telo, que es un albergue transitorio.
[8][9] Una frase recordada es la utilizada en un fragmento de Los Tolimenses, grupo cómico-musical Colombiano: "-Mi compadre iba por un camellón y había un tigre, y me dije: ¿cómo le aviso al compadre para que el tigre no entienda?, entonces le hablé en jeringonza.