Vicente Escudero

Años más tarde, decidió ir al Sacromonte a aprender de los maestros gitanos y, poco después, se vio con la confianza suficiente para empezar a actuar en los cafés de Madrid.

[4]​ Este fracaso le llevó a pasar una temporada dando tumbos por España, hasta que fue a dar con Antonio de Bilbao en el Café Las Columnas de aquella ciudad.

En ese escenario cosechó un gran éxito y se mantuvo durante mucho tiempo en cartel, lo que le forzó a ampliar su repertorio con baile clásico español.

Por esas fechas formaba ya pareja tanto de baile como sentimental con Carmita García, que le acompañó hasta su muerte.

Su éxito entre lo más granado de los artistas del surrealismo (entre su público y contertulios pudo contar con el escritor y teórico André Breton, los poetas Louis Aragon y Paul Éluard, el cineasta Luis Buñuel, el fotógrafo Man Ray, que lo utilizó de modelo en una de sus fotografías,[5]​ o el pintor Joan Miró), no corrió parejo con el favor del público general, por lo que Escudero y su socio perdieron la inversión y debieron cerrar ese teatro experimental.

[4]​ Se esforzó, además, por dar al baile flamenco una autenticidad basada en la reciedumbre y la virilidad.

Así mismo, se ha erigido en Valladolid una estatua en su honor en el Campo Grande, que lleva el nombre Baile en bronce, obra de la vallisoletana Belén González Díaz e inaugurada en 1995.

Estatua en el Campo Grande de Valladolid , de la escultora Belén González .
Fachada del centro cívico Vicente Escudero, en la travesía de la calle de la Verbena (Valladolid).