[1][2][3] Arroyo debutó en Atlético Tucumán en el año 1973, cuando el decano se coronó campeón de la Liga Tucumana y se ganó la clasificación al Nacional 1974, donde tuvo un gran rendimiento.
[4] En 1975 es transferido a Independiente, donde se consagró campeón de la Copa Libertadores.
En 1976 se coronó campeón de la Copa Interamericana al convertir el último penal en la definición frente a Atlético Español.
En 1977 fue subcampeón del Metropolitano por 2 puntos de diferencia, pero puedo tomar revancha en el Nacional cuando derrotó a Talleres en la final.
[5][6] En 1981 tuvo su primera experiencia internacional al viajar a México para jugar en Monterrey.