Pasó a final junto a otras cinco mascotas: una bola de nieve, un rebeco, un cordero, un erizo y una comadreja.
Se hizo reconocible en todo el mundo por el hecho de que todas las retransmisiones de los Juegos comenzaban con una breve animación en la que Vučko aullaba "¡Sarajevooo!".
[2] Según el COI, el carácter amigable de la mascota contribuyó a que el lobo se deshiciera de su mala imagen en la región como animal temible y sanguinario.
[1] También tuvo una tira cómica que se publicó en varios periódicos yugoslavos, creada por Nedeljko Dragić.
Su imagen se comercializó en una amplia gama de productos, como peluches y pins.