Vuelo 358 de Avensa

El elevador fue reparado y mal ajustado en mantenimiento cuatro días antes del accidente La aeronave del vuelo 358 era un Douglas DC-9-14, que para 1974 tenía solo 7 años en servicio para Avensa, que lo compró a Douglas Aircraft Corporation en 1967, comenzando así la era de los aviones a reacción en la aerolínea, que ya tenía en su flota los aviones DC-3 y Convair 580.

El vuelo 358 despegó por la pista 05 del Aeropuerto Internacional José Tadeo Monagas de Maturín, con 66 pasajeros a bordo y 6 tripulantes (los dos pilotos y 4 tripulantes de cabina).

Al minuto y 25 segundos del despegue, un elevador del DC-9 se desprendió en la fase de ascenso y dejó al avión incontrolable, sin comando de cabeceo.

NTSB determinó que las dos turbinas funcionaban a plena potencia al momento del impacto, no tuvieron ningún estallido, de manera que fallas de las dos turbinas del avión no fue causa del accidente.

NTSB también determinó que no hubo problema de sobrepeso.