Vuelo de brujas

Previamente la obra había pertenecido a la familia Sota, importantes empresarios de Bilbao.

[3]​[4]​ Tres personajes, vestidos con faldas, con el torso desnudo y tocados con capirotes en forma de mitra, decorados con pequeñas serpientes, e iluminados por un foco de luz exterior al cuadro, sostienen en el aire a otro hombre, este desnudo, abandonado en sus brazos, al que insuflan aire soplando sobre su cuerpo, como revelan sus hinchadas mejillas.

En la parte baja, dos hombres, vestidos de agricultores, han logrado la cumbre de la montaña, el camino tortuoso y ascendiente se pierde en la oscuridad del fondo, mientras su asno se ha parado más abajo.

[1]​[4]​[5]​ El cuadro se ha sometido a radiografía y reflectografía de rayos infrarrojos lo cual ha servido para demostrar que Goya realizó un cambio importante en la composición: la figura que ahora anda de frente, cubierta por una manta blanca, originalmente se situaba de espaldas, marcha atrás por el camino por el cual había subido, buscando el asno, que se ve más abajo, y que era un símbolo de la Ignorancia usado por Goya también en otras obras.

[3]​ Vuelo de brujas protagoniza la película Trance (2013) dirigida por Danny Boyle; el cuadro va a ser sustraído en una subasta y desencadena el argumento del filme.