Al año siguiente dirigió Uniforme Blanco y Lástima que sea una perdida, obra por la cual fue consagrado por los críticos teatrales el mejor director de ese año.
A fines de la década de 1960 se inició en televisión como asistente, y se consagró como director en 1972, con la telenovela Me llaman Gorrión, con Beatriz Taibo y Alberto Martín como coprotagonistas.
Luego vendrían numerosas horas de televisión, entre ellas muchos capítulos de Su comedia favorita y, en 1985, la novela de Delia González Márquez Coraje, Mamá, con María Aurelia Bisutti y Raúl Aubel.
En 1979 y 1980 dirigió por Canal 9 las dos obras mensuales que integraban el programa Teatro de Humor de Darío Vittori.
Otras puestas destacables son la que realizara en 1976 en el Teatro General San Martín de Dulce... dulce vida, obra de su autoría en colaboración con Víctor Buchino basada en la obra Así es la vida, la comedia musical infantil Plumas y Plumerillos y, en 1977 y 1978, Chicago de Bob Fosse por la compañía de Nélida Lobato en el Teatro El Nacional.